domingo, 5 de octubre de 2008

Benefícios del gateo


El proceso de aprender a gatear para un bebé es muy importante en su vida, establece un gran avance en su desarrollo neurológico y de coordinación.
El gateo ha sido llamado un “evento preparador”, porque establece el escenario para otros cambios en el bebé y su relación con el ambiente y la gente en él (Bertenthal y Campos, 1987; Bertenthal, Campos y Barreto, 1984; Bertenthal, Campos y Kermoian, 1994), ya que le permitirá tener más autonomía y así poder desplazarse con mayor seguridad y libertad por donde quiera. Además prepara a los niños para futuros aprendizajes como el proceso de lectura y escritura.

Gatear permite establecer conexiones entre los dos hemisferios, ya que cuando el bebé gatea coordina sus movimientos de manera que el brazo izquierdo va sincronizado con el pie derecho y el brazo derecho con el pie izquierdo; esto ocurre, porque la información pasa rápidamente de un hemisferio a otro, debido a que cada hemisferio controla los movimientos de las extremidades del lado opuesto. Este tipo de conexión puede hacerse más compleja aún si se realizan movimientos en donde los dos hemisferios estén trabajando de manera simultánea, lo que permitirá el desarrollo de diferentes funciones cognoscitivas.

También se produce un desarrollo de la sensibilidad táctil de la palma de la mano y de los dedos, puesto que el bebé al gatear recorre distintas superficies tocando todo tipo de texturas; esto beneficiará el tomar los objetos pequeños, coger correctamente el lápiz y comenzar con éxito el proceso de escritura, como ya se había mencionado.

Por otro lado los bebes que saben gatear consiguen diferentes tipos de logros como ser más sensibles a la ubicación de un objeto determinado, saber que tan grande puede ser este y conocer su aspecto. Se dan cuenta como luce algo de cerca y como lo hace de lejos. Asimismo pueden diferenciar formas similares que difieren en color, tamaño o ubicación (J. Campos, Bertenthal y Benson, 1980). Por esta razón se podría decir que gracias al hecho de haber gateado podemos solucionar problemas que requieran de la orientación espacial.

Los bebés al gatear comienzan a moverse de un lugar a otro, lo que genera gran importancia en el ámbito emocional y social, puesto que ya no son niños estáticos es un mismo lugar; si desean acercarse a una parte, tienen la posibilidad de lograrlo, como también pueden alejarse de algo si les parece. Esto es un avance en el desarrollo del dominio, mejora la confianza y la autoestima.

En consecuencia, el gateo es de gran ayuda para el fututo del niño; es muy importante estimular al bebé, pero no forzarlo a que lo haga, ya que cada niño tiene un ritmo de desarrollo distinto, puede ocurrir que el bebé que gatea antes tarde más en aprender a caminar, debido a que le parece más simple y más rápido gatear. Lo fundamental es que sienta el apoyo de su entorno en todo momento.

Estimulación Psicosocial


Los niños cuando son pequeños reciben estimulación psicosocial de su entorno de distintos modos y cantidades, esta estimulación en muchos casos es denominada también experiencia preescolar y está totalmente relacionada con la madurez para el aprendizaje escolar, debido a que ésta afecta el lenguaje, motivación y a todo tipo de desarrollo.
Cuando se ejerce el aprendizaje escolar, el niño es puesto a información sistemática, la cual para poder ser realizada de manera adecuada es necesario y recomendable que el niño requiera una serie de experiencias previas. En estas situaciones hay niños que están en una total desventaja, siendo aquellos que están privados de algún sentido, ya sea visión, audición, etc, privados en cuanto a las exigencias requeridas o también de ciertas experiencias.
Se realizó un estudio por Hilliard y Troxell (1937) el cual tenía como función principal poder presentar las relaciones existentes entre el acervo de información y el progreso que tiene el niño en su aprendizaje de la lectura. Para esto fue necesario crear dos grupos con los niños de primera preparatoria; un grupo era los con alto y rico acervo cultural y el otro grupo con un escaso acervo cultural. El procedimiento fue evaluar a ambos grupos en experiencias previas, vocabulario, complementación de cuadros, etc, y luego fueron clasificados, finalmente fueron sometidos a un test de rendimiento de lectura, el cual fue efectuado a finales del primer y segundo año. Los resultados fueron los siguientes; los niños que poseían un acervo cultural alto obtuvieron resultados superiores en comparación con aquellos niños que tenían un escaso acervo cultural a pesar que entre ambos grupos no existía una gran diferencia entre edades mentales.
Es por esto que es de suma importancia la estimulación que es entregada a los niños, no solo en sus primeros años que son los fundamentales en cuanto a estimulación y motivación, sino también a lo largo de toda su niñez y desarrollo. Esta es principal misión de los padres para con sus hijos, ya que el nivel cultural que los niños obtengan dependerá netamente del nivel que sea entregado por los padres y nivel general existente en el hogar. Caso contrario es cuando los niños no reciben esta estimulación de parte de sus padres y hogar, siendo estos quienes probablemente mas adelante posean un retaso en su desarrollo, ya sea de tipo motor, de vocabulario, etc. Es aquí en este tipo de casos cuando deben adquirir una adecuada estimulación psicosocial, ya que esta mejora la atención de los niños y su emotividad, ayudándolos a tener un adecuado desarrollo y madurez para y con su aprendizaje escolar.

sábado, 4 de octubre de 2008

Células madre, beneficios para la salud, implicancias éticas y sociales

¿Cómo podría verse beneficiada la humanidad con los avances científicos en el campo de la salud, especialmente con los estudios recientes relacionados con la obtención, aislamiento y aplicación de células madre? ¿Hasta qué punto nos veríamos beneficiados con estos avances médicos? y ¿Qué aspectos éticos y sociales surgen de estas investigaciones genéticas en humanos?

En la actualidad, las células madre son objeto de investigación de miles de científicos y albergan la esperanza para la cura de miles de enfermedades.
Las células madre son células con una amplia capacidad de autorrenovación y de convertirse en varios tipos de tejidos. Tienen dos características que las distinguen de todas las demás células. La primera, es que son células "no especializadas", capaces de renovarse durante largos períodos de tiempo mediante replicación celular. La segunda, es que bajo ciertas condiciones se transforman en células especializadas tales como células cardíacas o neuronas. Dicho de otro modo, una célula madre cuando se divide es capaz de generar una célula igual a sí misma y otra diferente, especializada. Puesto que al dividirse siempre forman una célula idéntica a ellas mismas, siempre se mantiene una población de células madres. Las células madre (también llamadas stem cells) tienen la capacidad de producir células nerviosas, pulmonares, hepáticas, sanguíneas, cardíacas o cartilaginosas. Esto significa que podrían producir órganos completos, como el riñón y el corazón; curar la diabetes por medio del trasplante de células pancreáticas; regenerar el tejido nervioso destruido por enfermedades como el Alzheimer y el Parkinson; etc.
Estas células son obtenidas mediante tres fuentes principales de células madre: Las embrionarias, que son obtenidas de un embrión durante los primeros días de desarrollo, éstas tienen una gran capacidad de división y diferenciación, pero su uso tiene fuertes reparos éticos y religiosos, pues se debe destruir el embrión para obtenerlas. Las adultas, generalmente obtenidas de la médula ósea, de la sangre o del tejido adiposo mediante un procedimiento especial. Y las del cordón umbilical, que son obtenidas del cordón y la placenta, normalmente obtenidas después del parto. Su obtención es segura para la madre y para el bebé, a la vez de indolora y rápida. La preservación de estas células a -180º C y -230°C en nitrógeno líquido puede mantenerlas viables y útiles durante algunos años.
Las exploraciones en el uso de células madre continúan en patologías degenerativas para las que no existe tratamiento como es el caso de la enfermedad de Alzheimer o el Parkinson. Tanto éstas como la diabetes se caracterizan por la muerte de células, neuronales en el caso de las dos primeras y pancreáticas en el de la última. De modo que la posibilidad de regenerar esta pérdida mediante la inyección de células progenitoras es tremendamente alentadora y atractiva. Muchos expertos dudan todavía de que las nuevas células surgidas de las progenitoras inyectadas sean capaces de funcionar correctamente. Otra de las áreas exploradas es la cardiovascular. Infartos, isquemias y otras patologías coronarias son también un objetivo para el uso de células madre.

Evidentemente estas investigaciones han generado controversias respecto al tema, el primer proceso descrito, que involucra la destrucción del embrión para obtener estas células, arrastra la mayor controversia sobre las células madre. Asimismo, son numerosas las voces que se declaran en contra del uso de embriones sobrantes de los programas de fertilización 'in vitro' para la investigación. En cuanto a la clonación terapéutica, la crítica es la misma.
Paola Zúñiga M.

La importancia del apego.


¿Qué necesita un niño para crecer bien y desarrollarse? Comer, beber, respirar, sólo debe satisfacer estas necesidades básicas para alcanzar su desarrollo y su bienestar pleno.
Sin lugar a duda, los niños necesitan algo más, necesitan mucho afecto, cariño y amor, por eso la presencia de la madre es fundamental en los primeros meses de vida, pero ¿qué pasa con aquellos niños que vienen a este mundo y son abandonados por sus madres? ¿quién cuida de ellos?, ¿quién los protege?, ¿quién les entrega el cariño y el amor que necesitan, si no tienen a sus madres cerca, si éstas no están junto a ellos?

En la década del 50, el psiquiatra Jhon Bowlby, realizó varios estudios a niños que habían sido abandonados por sus madres; de está manera estableció la teoría del apego. Según Bowlby (1951), el apego es “el vínculo afectivo que se establece entre la madre y el bebé”, pero que en muchas ocasiones la figura de apego primaria puede ser el padre, la abuela, la madre adoptiva o cualquier adulto que cuida del recién nacido.
A través, de éste vínculo el niño recibe todo el afecto, cariño y protección que necesita para satisfacer sus necesidades físicas y psicológicas, así como también, le permite adaptarse a este nuevo mundo con confianza y seguridad. De esta manera, el niño durante sus primeros años de vida, irá desarrollando conductas de apego como llorar, sonreír, aferrarse o mirar a los ojos, porque así obtendrá los cuidados necesarios que le ayudarán a sobrevivir.
Por esta razón, la primera relación de apego es de gran importancia para el bebé, porque, influirá de manera positiva o negativa en las futuras relaciones que establezca con sus pares. Esto quiere decir, que si el niño recibió el cuidado necesario desde pequeño, éste podrá establecer lazos afectivos duraderos cuando sea adulto, tendrá buenos amigos, buenas relaciones de pareja, además, será independiente y desarrollará su autoestima de manera satisfactoria, de lo contrario, si no tuvo a alguien a su lado que le entregara afecto, ni que lo protegiera o si fue maltratado, sus relaciones futuras estarán marcadas de violencia, será una persona agresiva , presentará problemas conductuales que no le permitirán ser una persona amistosa y vivirá completamente apartado de la sociedad, es decir, en el aislamiento absoluto. Por lo tanto, es de suma importancia que los niños crezcan con mucho amor para que sean adultos completamente felices.